 Después de la desastrosa entrega inicial de la actualización de Windows 10 octubre 2018 Microsoft está tratando de nuevo, en un post de blog, de explicar su enfoque a la liberación de alta calidad de las actualizaciones de Windows 10.
Evidentemente, al llamar a los problemas del mes pasado “pequeños pero serios”, Microsoft minimiza bastante el principal de ellos, cuyo resultado ha sido la eliminación de archivos de los usuarios, un problema que nosotros calificaríamos más bien de “muy grave”, por mucho que no haya afectado a todos los usuarios que actualizaron en un primer momento.
Microsoft dijo que el problema ha puesto en entredicho una tendencia de mejoras de calidad con cada versión sucesiva de Windows 10, pero al parecer se le ha “olvidado” citar que a veces las actualizaciones acumulativas (las que se envían a versiones ya establecidas) causan problemas antes inexistentes, y como muestra vale el problema surgido en la versión 1803 con la actualización del 24 de octubre, que ha provocado un fallo que hace que a veces no reconozca (o haga prácticamente imposible) la asociación de algunos tipos de archivos con aplicaciones de terceros para su visionado, ejecución o edición.
Michael Fortin, vicepresidente corporativo de Windows, dijo que había una caída real y constante en los indicadores clave de la calidad del producto: los volúmenes de llamadas y chat de servicio al cliente, incluso mientras el número de PCs que ejecutaban Windows 10 aumentaba. También afirmó que la actualización de Windows 10 de abril de 2018 tenía el mayor índice de actualizaciones netas de cualquier versión de Windows 10.
Fortin dijo que Microsoft invierte en la retroalimentación de planificación de clientes y socios para ayudarles a formar y enmarcar las especificaciones de los productos, incluyendo la definición de métricas de pruebas y éxito necesarias y emplear una amplia variedad de procesos de pruebas automatizadas a medida que se desarrollan características, permitiéndoles detectar y corregir problemas rápidamente. Insistió en que las pruebas eran una parte clave de la entrega de Windows y que las características necesarias para pasar pruebas fundamentales para integrarse en Windows.
Muy brevemente abordó el tema de Microsoft disparando SDET probadores en 2014, observando que se ha cambiado la responsabilidad de las pruebas funcionales básicas a nuestros equipos de desarrollo con el fin de ofrecer un código de mayor calidad desde el principio. Esto es algo que nunca se debería de haber encomendado a otras fuentes que no fueran el equipo de desarrollo y prueba de la propia Microsoft.
También dijo que Microsoft tenía una fuerte cultura de ejecutar la última versión interna de Windows en sus propias máquinas, y luego para asegurarse de que los problemas son detectados y solucionados, pero la realidad es que, a pesar de esto, Windows 10 (y algunos elementos asociados, como Microsoft Edge o Skype) sigue teniendo algunos fallos a estas alturas difíciles de explicar.
También señala que los socios de Microsoft tenían sus propios laboratorios donde probaban Windows, que incluía pruebas con:
- Laboratorios de pruebas externas con cobertura global y continua para compatibilidad de aplicaciones, hardware y periféricos.
- ISVs para una gama de aplicaciones incluyendo antivirus (AV).
- Los OEM se asocian con Microsoft para probar y garantizar la calidad en una amplia gama de sistemas, dispositivos y controladores.
Pero quizás olvida que estas pruebas de asociados se centran sobre todo en las compatibilidades, lo que está muy bien, ya que lo que ni Microsoft ni nadie (bueno, quizás con la salvedad de Apple, que desarrolla un SO para una gama muy limitada de productos, de los que además tiene un total control) puede hacer es testar el sistema operativo en los miles de combinaciones posibles de hardware y periféricos existentes, pero siempre centradas en equipos nuevos o, como mucho, en actualizaciones de los ya existentes, pero siempre bajo el prisma de la compatibilidad y/o de que la actualización se realice de forma satisfactoria en base a dicha compatibilidad, pero no suele entrar en temas como el sucedido con los archivos de usuarios en este última actualización.
También hizo una llamada al programa de Windows Insider para proporcionar ideas frescas y valiosas, con programas similares disponibles para otros clientes comerciales, tales como el programa de Windows Insider para negocios que permite a las organizaciones acceder a las generaciones de vista previa para validar las aplicaciones y la infraestructura antes de la próxima versión pública de Windows. Esto está muy bien, el problema surge cuando no se atienden, a veces por no haber un número alto de notificaciones, incidencias que pueden ser graves, como ha sido el caso.
También existe el programa de sólo invitación para los clientes de grandes empresas, el programa de previsualización de adopción de tecnología (TAP), que permite a los clientes de la empresa proporcionar información temprana sobre las actualizaciones de productos a través de pruebas de productos en el mundo real para ayudar a Microsoft a identificar problemas durante el proceso de desarrollo.
Cuando llega el momento de las liberaciones reales, Michael observó que la empresa utilizaba la toma de decisiones basada en datos usando paneles y métricas detallados para evaluar las compilaciones.
Observa que Microsoft utiliza sus capacidades de detección y respuesta en tiempo real para desenrollar ventanas de manera cuidadosa y orientada a los datos, y que su primer principio es sólo actualizar los dispositivos que sus datos muestran tendrán una buena experiencia, actualmente utilizando un modelo de aprendizaje automático para seleccionar los dispositivos a los que se ofrecen las actualizaciones en primer lugar. Si Microsoft detecta que un dispositivo puede tener un problema, no ofrecerá la actualización (de forma automática) hasta que se resuelva ese problema.
El despliegue también comienza lento y sólo está disponible para los “buscadores”, los usuarios que toman medidas para obtener las actualizaciones temprano, mientras que Microsoft supervisa cuidadosamente la telemetría, incluyendo la retroalimentación de sus equipos de servicio al cliente, con especial incidencia en los nuevos problemas. Microsoft también analiza los logs de retroalimentación y capturas de pantallas directamente a través del centro de retroalimentación, y escucha las señales enviadas a través de los canales sociales (el problema, repetimos, es que se basa luego en el número de reportes recibidos sobre un tema, no en la posible importancia de este, sobre todo si no pasa el primer “corte” en cuanto a su número).
Si Microsoft encuentra una combinación de factores que dan lugar a una mala experiencia, crean un bloqueo que impide que los dispositivos similares reciban una actualización hasta que se produzca una resolución completa.
Microsoft indica también que continúan buscando maneras de mejorar su capacidad para detectar problemas, especialmente problemas de alto impacto donde hay señales de bajo volumen y potencialmente débiles, incluyendo recientemente la capacidad de los usuarios para indicar el impacto o la severidad de los problemas cuando proporcionan información mediante el envío de comunicados.
Fortin dijo que a pesar de las tendencias positivas, también escuchan claramente las voces de los usuarios que se enfrentan a problemas frustrantes, y se compromete a hacer más y se centran en la innovación de calidad centrada en el diseño de productos, desarrollo, validación y entrega.
Lo que Fortin no dio fue una verdadera explicación de por qué han ocurrido los problemas con la actualización del 2018 de octubre, y además del trabajo de amplificación de “señales débiles”, por qué esas cuestiones no volverán a suceder. ¿Quizás porque a partir de ahora van a descargar menos la responsabilidad en los usuarios “Insider” y van a realizar internamente el trabajo que nunca deberían de haber dejado en manos de terceros, donde Microsoft no puede controlar las condiciones reales bajo las que se hacen las pruebas? ¿Quizás porque van a prestar más atención a las comunicaciones que atañen a problemas reales y graves y menos a temas de presentación, que aunque importantes, no afectan al funcionamiento de Windows 10? Bien, solo el tiempo lo dirá, pero lo que está claro es que Microsoft no puede permitirse que vuelva a ocurrir un caso como este.
Pueden leer la entrada completa y larga del blog de Fortin en este enlace.
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