 De todos es sabido las restricciones impuestas por el gobierno de los EEUU al comercio con Huawei, según las cuales estos teléfonos dejan de recibir actualizaciones de Android y certificaciones de Google, lo que implica que no podrán instalar ningún software relacionado con Google ni con Google Stores (incluida, por supuesto, esta).
Entonces, cuando parece desaconsejable comprar un móvil de Huawei y de Honor (que pertenece a Huawei, y por lo tanto están sujetos a las mismas limitaciones), ¿por qué decimos que puede ser un buen momento para hacer todo lo contrario, es decir, hacernos con uno?
Bien, la razón es que, si bien no se van a actualizar a versiones posteriores de Android a la que ya tengan instalada, todas las unidades fabricadas antes del 16 de mayo de 2019 sí que van a seguir pudiendo acceder a Google Store y van a seguir recibiendo actualizaciones de las aplicaciones, y en cuanto a Android no queda claro si, a pesar de no recibir actualizaciones a versiones superiores, van a recibir o no las actualizaciones de seguridad.
Por otro lado, los teléfonos de ambas marcas, cada uno dentro de su categoría, son terminales que gozan de una gran calidad y características, sobresaliendo sobre todo las cámaras de los modelos superiores de Huawei. Admás, y precisamente por estar restricciones, tanto las operadoras como los vendedores están ofreciendo las unidades que tienen disponibles con unos muy importantes descuentos, lo que significa que por un precio muy inferior al que corresponde a un terminal de su categoría, características y prestaciones, vamos a poder hacernos con uno.
Y en cuanto a que no sea posible actualizar a una versión superior de Android a la que ya tenga instalada, bueno, ni de lejos son los únicos terminales a los que les ocurre esto, y además con la versión instalada funcionan perfectamente, por lo que las dudas se limitan a si van a recibir o no las actualizaciones de seguridad.
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