Comienza este año 2024 con una lluvia, pero no de la esperada agua, sino de malware de todo tipo, camuflado entre anuncios de caducidad que nos piden actualizar datos, avisos de cuentas bloqueadas, ofertas increíbles o sorteos en los que hemos sido agraciados.
Ante todo esto, no está de más recordar algunas reglas básicas para defendernos, ya que, si bien muchos de estos correos son bloqueados directamente o bien por el lector de correo o bien por nuestro antivirus, muchos logran pasar esos filtros, quedando nuestro comportamiento como última defensa. Vamos a ver algunas medidas a tomar:
1ª.- Ante correos en los que no sepamos de quien es, el remitente no coincida con el que indica en el mensaje o no tengamos relación con él, lo mejor es eliminarlos directamente.
2ª.- Si recibimos correos de este tipo en una cuenta que no utilizamos para estos fines, lo mejor es eliminarlos directamente.
3ª.- Si en un correo no se indica claramente nuestro nombre (solo señor o señora, es muy probable que se trate de un correo fraudulento. Si fuera legítimo, lo normal es que el remitente conozca nuestro nombre (o el que hemos utilizado al darnos de alta), y se dirija a nosotros por él.
4ª.- Los bancos JAMAS piden datos personales por correo, unas veces porque ya los conocen y otras porque, en todo caso, nos piden que entremos en su web, aplicación, o que nos personemos en sus oficinas. En especial, nunca nos van a pedir el número de cuenta (eso ya lo saben ellos) o cualquier PIN o contraseña de acceso.
5ª.- Ante la duda, si en el correo nos ofrecen un enlace para entrar en su web, no utilizarlo. Entrar en su web, pero por el enlace que tengamos en el navegador o por la aplicación que tengamos instalada.
6ª.- Si necesitamos instalar la aplicación, hacerlo SIEMPRE desde la web oficial o desde la tienda correspondiente (Play Store o App Store), evitar siempre utilizar posibles enlaces adjuntos al correo.
7ª.- Mucho ojo con los correos que, bajo la apariencia de ser de compañías de transporte o de tiendas online, nos piden confirmar la dirección o nos reclaman un pago, salvo que estemos esperando realmente un paquete (y en el correo se especifique el número de expedición y este coincida con el que ya tenemos), se trata de correos fraudulentos que solo buscan, en el mejor de los casos, confirmar algún dato, como que la cuenta de correo realmente existe.
8ª.- Los regalos milagro no existen, y menos de compañías con las que no tenemos ninguna relación. Por supuesto que hay regalos y ofertas legítimas, pero estas por lo general se nos van a ofrecer mediante un mensaje desde la app, no mediante un correo electrónico. Y si es mediante un correo, comprobar siempre que nuestro correo es el que tenemos dado de alta en dicha web o tienda y que el correo es para nosotros (deberá ser a nuestro nombre, no con un destinatario genérico).
9ª.- Aunque en este aspecto los malos han avanzado bastante, la ortografía, la sintaxis y el uso del idioma pueden ser un factor para detectar correos maliciosos.
10ª.- Como regla general básica, JAMAS debemos facilitar un número de cuenta o cualquier clave de acceso a esta como respuesta a un correo o mediante un enlace que se nos ofrezca en dicho correo.
Estas son unas reglas básicas y bastante generales, pero que nos pueden evitar muchos quebraderos de cabeza, y ante la duda, es mejor ponernos nosotros en contacto con la compañía (sobre todo si es nuestro banco) y confirmar si es un correo legítimo o denunciarlo.
Y no, no tenemos un primo desconocido nigeriano que es príncipe y que nos va a regalar 5 millones de euros. En todo caso, los primos vamos a ser nosotros por contestar a ese correo.
|